Insólito: manejó 40 kilómetros dormido con el piloto automático, lo persiguió la policía y lo detuvo

En las afueras de Linköping, al sur de Suecia, las autoridades detuvieron a un conductor de un vehículo Tesla por quedarse dormido mientras conducía con el piloto automático activado durante más de 40 kilómetros.

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El individuo, empleado de una compañía de entrega de vehículos, operaba un Tesla Model X del año 2019 por la autopista E4 en dirección noreste, cuando otro conductor (también en un Tesla) notó la situación.

Según el otro conductor, le pareció extraño que el Model X se moviera a una velocidad tan baja y no intentara adelantar a ningún vehículo mientras estaba en el carril rápido.

Su sospecha se confirmó cuando al pasar junto al Tesla en cuestión, observó al conductor profundamente dormido mientras el sistema Autopilot de Tesla continuaba su funcionamiento.

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Inmediatamente, el testigo llamó a la policía, que comenzó a seguir al "sospechoso". Desde la llamada de alerta hasta que la policía alcanzó al vehículo, el Model X había recorrido aproximadamente 20 kilómetros, con el conductor aún dormido.

Según lo reportado por el medio local ‘Vibilagare’, hubo varios intentos fallidos por parte de la policía, y otros 20 kilómetros recorridos, antes de lograr que el conductor se despertara. Primero intentaron detenerlo en la primera salida disponible, pero al no lograrlo, tuvieron que esperar hasta la próxima.

Cuando el conductor del Tesla Model X finalmente despertó, giró bruscamente a la derecha y estuvo a punto de chocar con el vehículo policial. Finalmente, se detuvo en una estación de servicio y la persecución terminó.

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Aunque inicialmente intentó negar los hechos diciendo que nunca cerró los ojos, admitió más tarde haberse quedado dormido, explicando que no había dormido nada la noche anterior y que estaba estresado por tener que entregar el vehículo a tiempo.

Durante el interrogatorio, el conductor expresó su vergüenza. "Fue por el agotamiento. Tengo un Tesla con Autopilot que me hace sentir muy cómodo y seguro", dijo.

"Cuando le explicamos al conductor lo que acababa de pasar, y lo que él había hecho, me di cuenta de lo peligroso que había sido el episodio", declaró uno de los oficiales a cargo de la operación en el informe sobre el incidente.

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"El hombre estaba conmocionado, enojado y muy cansado. Mi impresión fue que apenas registraba lo que acababa de ocurrir", añadió.

El hombre fue acusado y condenado por conducción imprudente.

El suceso registrado en las carreteras suecas sorprende, aunque no por ser inédito, ni por ser el más grave. El fenómeno de los conductores fatigados que optan por confiar el control del volante a la tecnología es recurrente y su alcance es global.

En septiembre de 2022, se capturó a un dueño de un Tesla en una autopista muy concurrida de Ontario, Canadá, durmiendo al volante con el asiento reclinado, viajando a más de 100 kilómetros por hora.

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En diciembre del mismo año, la policía de Alemania emitió un comunicado denunciando a un conductor de un Tesla que activó el sistema Autopilot con el único propósito de dormir durante el tramo entre Viereth-Trunstadt hasta Bamberg-Hafen, a nada menos que 110 kilómetros por hora. 

Fue solo en un control de tráfico cuando los oficiales solicitaron al conductor que frenara, que se dieron cuenta de que este no estaba despierto. Según el informe, tuvieron que tocar la bocina varias veces hasta lograr que el hombre reaccionara.

Más recientemente, en febrero del año pasado, una escena muy similar ocurrió en la Autopista 15 en Temécula, California, Estados Unidos: una mujer dormida al volante.

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En la otra costa del país, en noviembre del mismo año, se vio lo mismo en una autopista de Miami, un conductor de un Tesla con el asiento reclinado, la cabeza completamente relajada y apoyada contra la ventana, y los ojos completamente cerrados.

La autonomía de los vehículos se divide en cinco niveles que determinan hasta qué punto el conductor puede despreocuparse de la tarea de manejar.

Actualmente, el sistema de asistencia al conductor de Tesla se encuentra en el nivel 3, lo que implica que, en ciertas circunstancias, el conductor puede dejar de prestar atención al volante.

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Una de las principales críticas dirigidas a Elon Musk y su empresa es que generan una sensación falsa y engañosa de autonomía, promoviendo un uso irresponsable del sistema de asistencia al conductor.

Esto se debe a que, aunque se reconoce que el sistema de asistencia al conductor sigue siendo técnicamente parcial, la denominación de "Autopilot" y "Conducción Totalmente Autónoma" sugiere que se trata de una tecnología que permite la autonomía total. 

Aunque en las letras pequeñas se especifica que el conductor debe mantener la atención para intervenir según sea necesario, en la práctica, muchos conductores entienden que pueden desentenderse completamente de la conducción.

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Al no depender de la monitorización facial del conductor y, en su lugar, basarse en sensores de movimiento y tacto, un sistema de asistencia al conductor como el Autopilot de Tesla puede ser fácilmente manipulado, aprovechando la aplicación ocasional de presión sobre el volante para simular la presencia activa del conductor.

Naturalmente, esta situación ha llamado la atención de las autoridades reguladoras de seguridad, especialmente en Estados Unidos, donde se encuentra la sede central de Tesla.

La Agencia Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras de Estados Unidos (NHTSA, por sus siglas en inglés) ordenó el retiro de más de dos millones de vehículos Tesla, después de una investigación de dos años que concluyó que el sistema de conducción autónoma de la empresa no es lo suficientemente seguro.