La prevención no da plata, lo que da plata es el tratamiento’: gerente de la Liga contra el Cáncer Risaralda

María Teresa Romero es la gerente de la Liga contra el Cáncer Risaralda. Esta sobreviviente de cáncer de mama está al frente de los destinos de esa entidad desde hace 31 años y la ha convertido en una de las IPS más reconocidas en la región cafetera y el país. De hecho, la Liga cuenta con equipos de alta tecnología tan sofisticados como los de la Fundación Centro de Tratamiento e Investigación sobre Cáncer Luis Carlos Sarmiento Angulo (CTIC) y el Hospital SES de Caldas.

Uno de esos equipos será el primero de América Latina: un resonador de última generación con inteligencia artificial, el Pet Scan. Este aparato, que se instalará a finales de este año en el centro oncológico Bernardo Ángel Marulanda (fundador de la Liga), determina el estadío de evolución del cáncer, incluyendo el cáncer de pulmón, cabeza y cuello, colon, recto, esófago, linfoma, melanoma, mama, tiroides, cérvix, páncreas y cánceres cerebrales.

"Este equipo no solo sirve para el diagnóstico de patologías oncológicas, sino también de enfermedades neurológicas, cardiacas y gástricas. Con esta tecnología seremos el showroom para Latinoamérica”, dijo Romero.

EL TIEMPO dialogó con Romero en momentos en los cuales el sistema de salud está en boca de todos los colombianos por la reforma de la salud que presentó el Gobierno Nacional al Congreso de la República y se hundió, y por la intervención de EPS como Sanitas, Nueva EPS y una de la región, la SOS, y la solicitud de liquidación de otras, como Compensar EPS.

Del fracasado proyecto de la reforma de la salud, Romero rescató la iniciativa de buscar a los pacientes en las veredas, en los municipios, “eso es lo que ha hecho la Liga siempre”, pero manifestó que también era “idealista”, porque planteaba “poner por cada paciente tantos médicos, tantas enfermeras; creo que ningún bolsillo, así sea nacional, resista eso”.

La cartera de la Liga es de más de 30.000 millones de pesos, “que es muy grande para nosotros y el mayor acreedor es el Estado, entidades como el Batallón San Mateo de Pereira”. Sin embargo, Romero explicó que esa cartera es “manejable” y la Liga goza de “buena salud”.

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“Las ligas contra el cáncer tenemos una ventaja: le pertenecemos a la comunidad, no tenemos dueños. En nuestro caso, hay un consejo superior que está integrado por voluntarios, personas muy representativas de Pereira, empresarios de diferentes sectores que donan su tiempo y su capacidad de trabajo”, comentó.

La Liga le cobra al que le puede pagar y muchas ocasionas dona procedimientos. "Si el paciente viene por una EPS y no tiene con qué pagar el copago, la Liga asume ese copago. Somos una entidad sin ánimo de lucro de cabo a rabo”, afirmó Romero.

La Liga tiene ‘La ruta por la vida’, cuyo objetivo es, precisamente, que el paciente y su familia estén acompañados en un momento tan difícil como el diagnóstico y después en el tratamiento de la enfermedad. La ruta se inicia en la realización de la biopsia, la lectura de esa biopsia y la entrega de los resultados, que no la hace el médico oncólogo, sino un equipo psicosocial, un psicólogo y una trabajadora social. En ese momento, el paciente está acompañado por su familia.

"El cáncer requiere mucho apoyo, traduce muerte así no sea muerte, es un tema doloroso, pero de amor también", comentó Romero.

El gran sueño de Romero y del consejo superior de la Liga es construir una gran clínica en un lote que fue donado y está ubicado en un punto estratégico: en la avenida La Romelia – El Pollo, una vía por la cual pueden llegar pacientes de Caldas, Quindío y Cartago y municipios del Norte del Valle del Cauca.